En rigor no es la primera vez que Ancud se rasgan vestiduras cada vez que se trata de dilucidar el monto real de la millonaria deuda que por años y sin atajo alguno, se ha atribuido a las administraciones de salud educación y atención al menor, con la salvedad que en el actual escenario la situación es más compleja que en otras por cuanto se avizora el pronto inicio del pago o descuentos según sea el caso.